(Charla de colectivo con una desconocida rubia, linda, ojos claros, de unos 65 años. Ella comienza la charla)
- Toda la ciudad es un caos
- ¿Sí?
- Salí de Palermo a las cinco y media, esperé el colectivo hasta las seis y veinte. Me tuve que tomar un taxi. Llegué apenas a tiempo para retirar el pasaporte
- ¿Tardaron mucho en entregártelo?
- Dos meses, y tuve que armar un escándalo. Hoy le dije al policía: Viajo esta noche y si me pierdo este crucero que estoy pagando hace cinco años, te traigo toda la televisión.
- ¿Un crucero? Qué lindo...
- Ay, sí, lindísimo. Encima, es medio trampa, porque me invitan...
- ¿Un admirador?
- Un amigo que conocí hace veinte años, cuando estaba casada con mi primer marido
- ¡Esos son amigos! ¿Salís de Brasil?
- No, nos encontramos en Costa Rica. Él viene de Miami. Pero no sé bien cómo sigue, es todo sorpresa. Estoy tan nerviosa...
- ¿Nunca estuvieron juntos antes?
- Noooo
- Pero, ¿él te gusta?
- Me encanta. Siempre me gustó.
- Qué bueno cuando la vida te sorprende así
- Y yo me lo merezco, porque la pasé muy mal con mi última pareja. Hasta me golpeó
- Bueno, que la pases genial. Me gustaría saber cómo sigue la historia
- Te doy mi mail.
- Esperá que anoto, …. Listo. Escribime, buen viaje! ¡Parada, chofer!
- Chau
- Chau, suerte!
25 mayo 2006
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8 comentarios:
Me encantó.
: )
Divina. Parece mi madre.
Bestiaria y Montevideana, un gusto verlas por acá
Alex, ¿no será su madre?
No estarás dejando el gancho para el segundo capítulo no?
Yo quiero saber como sigue ese crucero!!!!!!
que gran anécdota. y el final, buenisimo. saludos
Nos contás cómo sigue cuando te escriba ¿no?
Lo que me gusta de esto es que la vida siempre te sorprende aunque a veces tengas la sensación de que lo más emocionante ya pasó.
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